2024, Semana 35

Foto de Migsar.

Hay dos tipos de errores, los que están dentro de lo esperado, y los que no. No se trata de una simple forma de categorizar los errores, sino que es una distinción muy importante porque tradicionalmente nos enseñan a lidiar con el primer caso en todos lados, como la escuela, la familia y el trabajo, pero lidiar con el segundo caso es algo cotidiano pero de lo que casi no se habla. Las consecuencias de esto son desastrozas, porque a lo largo de la vida los errores de la segunda clase tendrán consecuencias mucho más trascendentes.

Los errores que están dentro de lo esperado son errores que, en general, parecen simples aunque sus consecuencias no lo sean. Por ejemplo, imaginemos que tengo que ahorrar más y pienso que el primer paso es intentar gastar menos, para gastar menos debo de saber cuanto gasto y decidir un limite razonable para el próximo periodo. Digamos que decido que voy gastar 1000 pesos al mes y termino gastando 2000, aunque se trata del doble, lo que es bastante significativo, parece que la solución es directa, basta tener más cuidado en lo que se gasta para gastar menos. Los errores del segundo caso a veces son mucho más difíciles de detectar, porque muchas veces ni siquiera parecen errores, retomando el caso anterior, tal vez el error fue asociar el ahorro con gastar menos, quizá si queremos ahorrar más lo único que tenemos que hacer es que el primero de los gastos sea para el ahorro, aunque sea un porcentaje muy bajo, por ejemplo, ahorrar 5 pesos cada mes al inicio y comprometerse a no tocarlo. Ambos son problemas, gastar menos también es muy importante, pero quizá no están tan relacionados como parece y el unirlos hace que nos resulte imposible resolver un problema complejo. El ahorrar aunque se gaste mucho al menos permite tener un avance e iterar, en lugar de tener un problema que es difícil incluso definir, se tienen dos problemas bastante claros, cómo ahorrar más, y cómo gastar menos.

Pensé en esto en particular la semana pasada por una experiencia que no tiene nada que ver con dinero, más allá de que se necesita dinero indirectamente para casi todo en el mundo. Hace unos meses, casi medio año, intenté usar una puerta como base para una mesa y construir las patas con el marco metálico que inicialmente la sostenía en la pared. Me tomó quizá un par de días, considerando que pienso mucho las cosas, no estoy tan acostumbrado a construir, me acabé el filo de dos o tres brocas haciendo los agujeros en el metal del tamaño que necesitaba. La cosa es que la mesa quedó bonita pero se movía mucho porque el marco no tenía soporte suficiente para la torsión. Después de eso me quedé pensando mucho en como podía arreglarla, era algo en lo que pensaba de repente y me distraía de alguna otra cosa que tenía pendiente, no quería quitarle esas patas, quería solucionar el problema de la torsión. Al final terminé por desarmarla la semana pasada, por el momento realmente no necesito la mesa y tenerla no era útil, quizá después la arregle con patas de madera tradicionales, quizá termine por tirar la puerta, pero me estaba concentrando en el problema equivocado y era algo que traía cargando. Inicialmente necesitaba una mesa, cumplió su propósito aunque de modo bastante mediocre, y después me tomó mucho desarmarla por no aceptar que había quedado mal y que era más fácil crear una nueva mesa cuando la necesite.

Creo que es muy común ese tipo de comportamiento, incluso si se menciona en ciertos círculos la importancia de iterar y moverse rápido, pocas veces se hace un esfuerzo por lograr un cambio positivo en ese sentido, o mejor dicho, el cambio se logra con métodos primitivos y crueles: selección natural. Al final la gente que se da cuenta, o la que no se da cuenta pero lo está haciendo bien, aunque sea una minoría estadísticamente hablando, es la que tiene éxito y cuando están la posición adecuada el ciclo se repite, o se deja de tener éxito porque se elige incorrectamente, o se elige al que entrega resultados. Funciona, definitivamente, pero no estoy convencido de que sea sostenible a escala humana.

Un poco relacionado con eso, he pensado mucho en que le diría al Migsar de hace un año si supiera lo que se ahora respecto a construcción, que no es mucho, pero la experiencia ha sido bastante intensa. Si no están al pendiente, hace un año, más o menos, tuve la oportunidad de comprar mi primera propiedad, había dos posibilidades principales, comprar un departamento pequeño pero listo para habitar, o comprar una casa un poco más grande pero antigua y que necesitara obras, decidimos tomar la segunda oportunidad, también hay algunas cosas para mencionar sobre el decidimos, pero será en otro momento. Siempre había tenido el sueño de construir mi propia casa y, para hacer la historia corta, lo sigo teniendo, pero no es el momento, me tardé demasiado en darme cuenta. He aprendido mucho, y me gustaría escribir algunas cosas al respecto, también sé que a veces si uno no presiona los momentos no llegan, pero bueno, al final existen distintos tipos de imprevistos, algunos se pueden ignorar, otros no.

El fin de semana lo pasé en Lisboa, teníamos que ir un día para renovar el pasaporte de mi hija y aprovechamos para hacer otras cosas necesarias. Además el sábado fuimos al zoológico de Lisboa, y quedé gratamente sorprendido. Durante este viaje me gusto más Lisboa, con algunas excepciones, no es una ciudad tan fea si uno se sale de la parte turística y “bonita”, o quizá la ciudad no es la fea sino la gente que gravita alrededor del turismo, que es otra de las cosas que me gustaría saber si es algo que realmente queremos o sólo la inercia de los actos de cierta gente que se mueve demasiado rápido como para detenerse a pensar en las consecuencias de sus actos. Esta vez nos quedamos cerca del zoológico, y como consecuencia no intencional, cerca del aeropuerto, muy cerca de una zona llamada Entre Campos, porque existen Campo Grande y Campo Pequeno, es una zona relativamente céntrica y bastante tranquila. Un día de mañana salí a caminar e hice más o menos una hora hasta la plaza de comercio, el clima estaba fresco, sin llegar a frío y existen banquetas en todo el camino. Mientras caminaba me puse a pensar en por qué en una ciudad bonita y con banquetas y sombra el peatón no tiene un papel central, tengo un par de teorías pero no tengo una respuesta. El zoológico de Lisboa me pareció muy bonito, inicialmente el precio me pareció elevado, pero ya viendo el interior y los eventos que incluye terminé por pensar que el precio era justo o incluso un poco bajo. Entre las cosas que más me gustaron es que, al menos en primavera y verano, todo está cubierto de árboles y sombra, por lo que incluso en un día soleado es posible ver la mayoría de los animales cómodamente. Algo que no me gustó tanto es el área exterior dentro del zoológico, que está destinada a comercio y comida, me parece que es necesaria y un reflejo de las expectativas de la mayoría de los turistas, pero aún así no me gustó.

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Estuve trabajando un poco en mantener un par de sitios web, optimizarlos un poco y generar algo de contenido nuevo, la verdad es que no estoy nada contento con los resultados, pero bueno, llevo poco tiempo, he estado concentrándome en aprender más sobre crecimiento y mercadotecnia digital, es gracioso pero después de trabajar durante más de 10 años en la programación web (a mi favor es que siempre fue principalmente aplicaciones) me siento en el punto de partida. La diferencia, que espero después rinda frutos, es que estoy esforzándome en aprender mucho más la parte de ventas. Estoy preparando algo en este sentido y espero lanzar muy pronto.

También creé una publicación en Medium para registrar mi aprendizaje de chino y ayudar a otros hispanohablantes a aprender mandarín. Creé el primer artículo pero no he logrado crear más aunque tengo un par de ideas, me es difícil porque no tengo visitas, aunque sé que necesito un poco más de tracción antes de esperar que a alguien le interese. Creo que crearé un grupo en Telegram, pero aún lo estoy pensando, más de lo que debería.

Algo que siempre me ha llamado la atención es la idea de generar contenido, no me refiero a la nueva moda de creadores de contenido, sino a una idea mucho anterior, alguna vez en la primaria intenté hacer una revista con unos amigos, y he tenido siempre la curiosidad de crear una editorial que publique en mexicano (ya sé, se supone que es español) algunos libros que por ahora sólo se consiguen en inglés o en argentino o español. Hablaba con un amigo sobre mi proceso de escritura hace poco tiempo, y le decía parte de lo que he puesto en otros posts, me resulta muy complicado en esta altura abrirme y publicar lo que realmente quiero, uno pensaría que no hay consecuencias pero cada vez más en internet todo es disponible y la tendencia es que empresas con una ética cuestionable cobren a otras empresas por hacer la parte de inteligencia de negocios, las redes sociales son muy traicioneras si uno no quiere o puede ir con las tendencias socialmente aceptables. La otra cosa es que toma tiempo, y si uno decide hacerlo de modo sincero toma aún más tiempo, la inteligencia artificial ayuda mucho cuando uno sigue racionalmente lo que las métricas en cada uno de los pasos dicen.